miércoles, 22 de octubre de 2014

Remontar el vuelo...

Cuando los grandes se caen, tiene la obligación de levantarse, porque el esfuerzo se demuestra estando a la altura de las caídas y resurgiendo en los peores momentos. Hoy todos hablan de nosotros. Muchos dicen que ya hemos vuelto donde deberíamos estar (perdiendo), otros dicen que nunca fuimos grandes y lo de hace unos partidos era solo una ilusión. Otros piensan que por fin vamos a ver al Valencia que siempre existe en toda liga, ese que gana contra los grandes pero que deja los puntos en los campos de los de la tabla baja.

Perdimos en A Coruña, no nos salió un gran partido, tal vez ellos fueron superiores… Pero, ¿vamos a criticar ya a un equipo que ha ganado al campeón vigente de liga? ¿Vamos a dar ya dudas de los jugadores que hace una semana tachábamos de héroes? ¿Vamos a bajar ya de la nube y decir que no vamos a ganar nada y que este equipo no tiene futuro? Tenemos esa opción, empezar a llorar y no confiar más en que podemos volver. Podemos empezar a criticar a Nuno, a los jugadores. Podemos echarle la culpa o buscar culpables... Parejo, Diego Alves por lesionarse, André Gomes, Barragán… Podemos tachar de culpable a cualquiera del vestuario pero dentro de una semana… ¿qué haremos? ¿Volveremos a coronarles de cracks cuando ganan 3 partidos seguidos? ¿Volveremos a decir que tenemos la mejor plantilla cuando en casa sigamos sin perder? ¿Volveremos a confiar solo cuando las cosas vayan? Hay que estar en las victorias pero la afición se demuestra estando en los peores momentos.

Hemos demostrado estar en las buenas y en las malas. Hemos demostrado que somos la mejor afición del mundo llenando el campo en la presentación de nuestro equipo solo aspirando a liga y copa. Hemos abarrotado el campo en partidos  a las 4 de la tarde y contra un Córdoba. ¿Y ahora ya nos bajamos del tren que antes nos coronaba campeones de liga y copa?
Pues yo saco pecho por este Valencia. Yo creo que las derrotas no hacen bajar los pies al suelo y nos hace pensar que ganar no siempre será tan fácil, que perder no hará valorar las victorias que vendrán después. Perder solo significa aprender de los errores y en el fútbol perder es simplemente corregir aquello que no ha salido bien y volver a luchar por continuar sumando puntos. Vamos a llevarnos derrotas pero de ellas aprenderemos y tal vez nos hagan ser mejores.

Si en Madrid nos critican y se fijan más en nuestros partidos que en los suyos, es porque nos ven rivales directos por la lucha por los primeros puestos y necesitan minarlos la autoestima para poder sentirse ellos con más fuerza que nosotros. A esos colchoneros les digo, la derrota del otro día os la dedico por los 3 goles que os llevasteis en Mestalla en 13 minutos. Os dedico la derrota porque ahora somos más fuertes y no volveremos a caer en el error cometido en tierras gallegas. A los que os reis, os invito a que seáis prudentes, porque quien ríe el último siempre ríe mejor.
Si duele la caída es porque estábamos muy arriba. Pero no hemos caído en balde, no hemos caído para quedarnos tirados en el suelo y que otros nos pisoteen. Nos hemos caído para levantarnos fuertes, con las pilas cargadas y con sed de victoria. Ahora valoraremos aún más si cabe cada punto y cada gol que saquemos en casa o fuera. Ahora saldremos al campo con ganas de demostrar que hemos aprendido de los errores y que los grandes no se hacen pequeños a base de derrotas sino que se engrandecen de aprender de las caídas.

Temed porque aún podemos ser mejores. En Madrid, en Barcelona, en Sevilla o en cualquier rincón de España tiene que saber que en Valencia hay un sueño y un club mucho más grande que todas las críticas que pueda recibir. Porque no es simplemente un escudo, un club o unos jugadores. Es una afición que defenderá a muerte los colores de su equipo, que viajara donde sea para ver ganar al Valencia y que pase lo que pase, estará al lado de los suyos. Porque como dijo un grande “No merecemos ser más segundos”. 

Nuestro próximo verdugo viene a Mestalla y le conocemos muy bien: Elche. Nunca estarás solo, Mestalla estará llena para ti. Porque puede que ahora no me merezcas pero seguro que es cuando más me necesitas.

AMUNT!

#JuntsTornem



sábado, 11 de octubre de 2014

Gracias fútbol...

No son 90 minutos de fútbol, son 90 minutos de alegría, de tensión, de ilusión y de evasión del mundo que te rodea. Son minutos donde solo un balón, un pase, un gol ocupa las preocupaciones en tu cabeza. Se siente sudando la camiseta, estando en el estadio o viendo el partido desde casa, pero amar el fútbol es entender que es mucho más que un deporte. Es una manera de compartir con los demás las alegrías, los triunfos y las derrotas. Es conocer a gente distinta, de distintos lugares pero con un mismo sentir por unos colores, un escudo y una camiseta. En el fútbol siempre hay rivales, ganadores, vencidos, derrotas y victorias que marcan la vida de uno pero sobretodo está la satisfacción de sentirte parte de una afición que representa los colores de una tierra, un escudo que es la bandera de miles de almas y una camiseta que engalana el corazón de los que verdaderamente amamos el fútbol.

Quien no lo vive, no lo entiende. Quien lo critica jamás entenderá lo que es vibrar 90 minutos, abrazarse con un desconocido en el campo, ir pitando por la calle al ganar un copa, esperar horas y horas en las puertas del estadio a que lleguen los jugadores. No sabrán lo que es salir al patio con ganas de colocar dos chaquetas como límites de portería y que empiece a rodar el balón como si de una Champions se tratará. No sabrán lo que es celebrar un gol corriendo por el campo o tirándose encima unos de otros. No sabrán la alegría de meter el golazo de tu vida y saber que no se volverá a repetir porque ni tú sabes cómo lo has hecho. No sabrán nunca lo que se siente al llegar a casa y contar con todo lujo de detalles la jugada que hiciste en el campo y que para ti fue merecedora del Balón de Oro. No sabrán la ilusión que se siente al recibir un balón como regalo o una camiseta de tu equipo en Navidad. No sabrán la alegría de ver a tu jugador favorito en la tele y querer ser algún día como él. No sabrán lo que es estar en tensión en el sofá de casa mientras tu equipo llega al descuento y le pitan el penalti que supondrá el gol de la victoria. No sabrán lo que es llorar cuando se pierde un título y festejar un triunfo pintándote la cara con los colores, enfundándote la camiseta y sacando todo lo que tengas de tu equipo y salir a la calle.

Quien no lo sabe, tampoco sabe lo que se pierde. Porque conocer la magia del fútbol da la oportunidad de conocer a la gente que rodea un escudo. Da la oportunidad de relacionarte con gente que siente los colores como tú, que vibrar por once jugadores como tú, que se deja la garganta y la voz en cada partido como tú y que simplemente un escudo ha hecho posible que dos personas distintas se unan por un sentimiento común.

Tal vez quien me lea piense que el fútbol es solo 22 tíos corriendo en un campo cuadrado con rallas blancas sobre el césped detrás de un balón. Si lees y piensas esto, entonces no entiendes la esencia del fútbol. Entonces simplemente deja de leer mis entradas, porque yo plasmo mis emociones en unas letras que quien las leen, comparte. Si a alguien mis historias o mis reflexiones no le gusta, simplemente gracias por ser diferente pero déjame a mi seguir siendo igual que muchos más que comparte conmigo un sentir por una pasión llamada fútbol.

Gracias balón por rodar cada fin de semana, gracias fútbol por existir y sobre todo, gracias mamá por hacerme valencianista.

#amunt

sábado, 4 de octubre de 2014

My team of dreams...

Primer prueba de fuego para los nuestros. Llegaba uno de los rivales más complicados de la liga. El actual campeón de la liga pisaba Mestalla. El Atlético de Madrid aterrizaba la capital del Turia. Y no se esperaba lo que le teníamos preparado. Un recibimiento como solo nosotros sabemos hacer. Mestalla se vestía de gala para el primer partido importante contra un rival de altura. Mestalla siempre está cuando su equipo lo necesita y esta vez no iba a ser menos. Un tifo espectacular cubría la grada de Mestalla y un emotivo recuerdo a Kempes engalanaba las gradas de un estadio que se iba a convertir en un fortín para los nuestros. Pero los jugadores también sorprendieron a la afición. En las camisetas un emblema: JUNTS TORNEM. Y cómo volvimos…

Las cosas quedaron claras a los 13 minutos de encuentro. 3-0. El Valencia dominando, demostrando un juego que sella su identidad esta temporada. No nos íbamos a achicar ante el líder sino que le íbamos a plantar cara como nosotros sabemos. Con buen juego, ideas claras, precisión en cada pase y hambre de gol en cada jugada. Con un despliegue de juego y una afición completamente entregada con los suyos, Mestalla fue una fiesta. 3-1. Resultado definitivo tras un gran Diego Alves, que volvió a ganarse el título de Parapenaltis oficial. Un gran partido de los nuestros que nos hace seguir arriba, donde solo los grandes permanecen y donde, a base de esfuerzo, nos estamos labrando un hueco.

Hemos de continuar, no podemos aminorar la marcha. Nuestros rivales simplemente han de saber que estamos aquí. Que hemos llegado para quedarnos entre los grandes y no vamos a dejar de luchar por lograr los triunfos que nos merecemos. Tenemos una gran plantilla que lo da todo en cada partido y en cada minuto. Pero sobretodo, es un orgullo formar parte de la mejor afición del mundo. En las buenas, en las malas, a las 10 de la noche o a las 4 de la tarde, en Bilbao, en Madrid o el Barcelona se han de oír nuestros cánticos, porque la mejor afición del mundo sigue al mejor Valencia de los últimos años. Puede que no tengamos grandes estrellas en nuestro club o tal vez sí pero no hemos pagado millones por ellas. Tenemos lo que todo club desearía tener: ganas de victoria, ilusión por unos colores, orgullo por un escudo y sentimiento por una camiseta. Gracias Nuno por hacernos soñar, gracias equipo por hacernos volver a luchar por lo que no debimos perder nunca.

Que nadie nos diga nunca que lo nuestro es un sueño. Porque los sueños solo mueren cuando se hacen realidad. Porque los grandes solo vuelven para labrar un futuro prometedor. Porque nosotros hemos vuelto para recuperar el sitio y el título que un día perdimos.


#HemosVuelto